Este día no es una celebración, sino una demanda política y de derechos humanos que exige el fin de la histórica etiqueta que nos ha criminalizado: la idea de que ser una persona trans es un trastorno mental.
Este día no es una celebración, sino una demanda política y de derechos humanos que exige el fin de la histórica etiqueta que nos ha criminalizado: la idea de que ser una persona trans es un trastorno mental.